Riesgo de hipertensión
La hipertensión, también conocida como presión arterial alta, se produce cuando la fuerza de la sangre contra los vasos sanguíneos es demasiado alta. La presión arterial alta puede provocar complicaciones graves, como un derrame cerebral o un ataque cardíaco, e incluso la muerte. Por lo tanto, conocer tu riesgo de hipertensión es importante para entender tus probabilidades de desarrollar presión arterial alta. Si bien algunos factores que contribuyen al riesgo de hipertensión no se pueden controlar, otros son modificables y pueden reducir las probabilidades de que una persona tenga hipertensión.
El riesgo de hipertensión de una persona tendrá en cuenta lo siguiente:
Aumento de la presión arterial. La presión arterial elevada oscila entre 120/80 mmHg y 129/80 mmHg. Aunque es alta, todavía no se considera hipertensión.
Diabetes. Aproximadamente el 60% de las personas con diabetes tienen presión arterial alta.
Obesidad Tener exceso de grasa significa que el corazón tiene que esforzarse más para bombear sangre y oxígeno por todo el cuerpo, lo que aumenta la presión arterial.
Dieta. Las dietas con alto contenido de sodio y bajo contenido de potasio pueden aumentar las probabilidades de que una persona sufra hipertensión.
Actividad física. El ejercicio de rutina reduce la presión arterial y mantiene sano el sistema cardiovascular.
Tabaquismo y alcohol. El consumo de tabaco y el exceso de alcohol pueden aumentar el riesgo de hipertensión de una persona.